lunes, 11 de febrero de 2013

Benedicto XVI, nuestro amigo del alma

A estas horas, es una noticia que se ha conocido a tal velocidad, sobre la renuncia del Santo Padre,
 
Cuando lo leí, pensé que podría ser un rumor, pero no ha sido así, pues distintos medios de comunicación fiable, lo han comunicado, en primer lugar, lo he conocido por dos amigos Blogueros con el Papa, luego por un sacerdote de Radio María, etc.
 
Cualquier cristiano, cuando nos esforzamos a que nuestro corazón esté bien dispuesto al Espíritu Santo, encontramos en los escritos del Papa, una sabiduía patrística. Su Santidad Benedicto XVI, es uno de los Santos Padres de la Iglesia Católica, a mi modo de ver las cosas, un místico, un alma de oración.
 
Su renuncia demuestra que no está apegado así mismo, sino que quiere hacer hasta el final la Santísima Voluntad de Dios,
 
Muchos nos hemos entristecidos por esta noticia, y la preocupación estoy convencido que ha sobrecogido a los que le esperaban en la JMJ 2013 en Brasil, nuestros hermanos debe comprender que el Papa no debe agotarse, pues es necesario que su tiempo de oración, también será muy provechosa para toda la Santa Madre Iglesia Católica. Y nosotros nunca dejaremos de rezar por este Amigo de Dios, que es Benedicto XVI. un verdadero amigo, y también lo es para nosotros, y por eso le obedecemos siempre, aunque ya no sea Papa. 
 
No cabe duda que nuestros obispos, en sus cartas a los feligreses, vamos a encontrar mucho agradecimiento cuando hablen del Papa, yo ya estoy esperando a ver que nos enseña nuestro querido obispo: Monseñor Carlos Osoro, arzobispo de Valencia.
 
 
Siempre estamos con el Papa, porque no olvidamos que Él y Cristo son inseparables, y nosotros con el Papa somos de Cristo, y siempre bajo la guía segura en la Barca de Pedro, que es la Iglesia, donde está el Papa, allí está Cristo.


Sabemos que Jesucristo es Señor y dueño de nuestra alma, el Santo Padre Beneedicto, por su cercanía y amor a Jesucristo, es nuestro amigo, el amigo del alma, quien nos ayuda espiritualmente para que seamos plenamente fieles a Cristo Jesús, y amemos a la Santísima Madre de Dios, confiando en Ella, como nuestra Madre e intercesora infalible,

He oído que está a la altura de los Grandes Doctores de la Iglesia Católica
 
 
 
 

Agencia EFE
 Logroño, 11 feb (EFE).- El obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño, Juan José Omella, ha expresado hoy a Efe su "gran sorpresa" por la renuncia del papa Benedicto XVI, al que ha calificado como un gran teólogo y místico, que deja un "impresionante" y "admirable" legado en sus escritos y homilías.
 
Benedicto XVI ha anunciado hoy oficialmente que renuncia al pontificado por su "edad avanzada", 85 años, a partir del próximo 28 de febrero.
 
Omella ha añadido que el actual Papa será "una figura que pasará a la historia como los grandes padres de la Iglesia, por su teología y por su mística y por su sencillez y profundidad".
 
"Hay que pedir que los cardenales acierten con el Papa que en este tiempo necesitamos", ha subrayado el obispo de la Diócesis riojana al referirse al proceso que se inicia ahora con la renuncia de Benedicto XVI.
 
Ha resaltado que es "un Papa de una gran cultura, abierto a un verdadero diálogo con la cultura de hoy, no solo con los ortodoxos y protestantes, también con los musulmanes y con los ateos y no creyentes".
 
"Es un hombre -ha dicho- que ha hecho una misión muy importante en la Iglesia, un hombre de una profunda fe", como lo demostró con la convocatoria del Año de la Fe para profundizar en esta materia.
 
Omella cree que en los mensajes de Benedicto XVI se observaba "una sabiduría mística, a la vez que científica", por lo que cree que es "un gran teólogo y un gran místico".
 
Ha reconocido que no podía pensar ni tenía indicios de que se pudiera presentar esta renuncia por parte del pontífice, a quien, durante la última temporada, "se le veía que tenía más dificultades para andar, a veces cansado, pero le veía muy lúcido en sus discursos y homilías".
 
A ello ha sumado el libro que publicó el pasado mes de noviembre sobre la infancia de Jesús y, según Omella, es "un hombre que está en plena actividad y rendimiento intelectual y no se podía intuir este acontecimiento de que renunciase, pero él ha visto sus limitaciones".
 
El obispo ha destacado, de las palabras en las que Benedicto XVI ha comunicado su decisión, las relacionadas con la que, a partir de ahora, desea servir a la Iglesia con "una vida dedicada a la plegaria".
 
 
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