domingo, 25 de agosto de 2013

Hermosa proclamación de eucarística-Jesús está con nosotros

Sea bendito y alabado el Santísimo Sacramento el Altar, ¡Viva Jesús Eucaristía!

Se dice que el número de los cristianos ha crecido, sin embargo, en esta secuencia de video, vemos algo distinto: sólo unos pocos han reconocido a Jesús, y se arrodillan para adorarle; pero cuando algunos no han comprendido el misterio de la Eucaristía, terminan aplaudiendo, algo que no se relaciona con la vida espiritual. Los aplausos siempre están en contradicción con la vida de santidad, por lo que no son actos espirituales.

Aquellos que no hacen caso, ni les sirve de ejemplo a seguir de los que se van arrodillando, pasan de largo, también se ha oído algunas risas.
 
 
 
"Lleven a Cristo a las periferias", decía el Papa Francisco, en el fondo, me ha gustado el testimonio valiente de este franciscano, ¡Bendito sea Dios! Me pregunto: ¿por qué se hace tan poco caso a nuestros Papas, cuando nos exhortan a vivir la  Vida de Cristo? No olvido, en los peces que caen en la red, como nos enseña nuestro amado Señor Jesucristo; peces malos, peces buenos. Los malos serán desechados, no sirven para nada aquellos que no renuncian a su maldad; pues ha habido malos que se han hecho buenos, de grandes pecadores a grandes santos. Ya que la salvación eterna es para todo lo que se dispone a bien en su corazón para recibir a Cristo Jesús y perseverar días tras días en el Amor de Dios.
 
Cuando hay una procesión del Corpus Christi cada año, Cristo pasa por las calles, pero muchos pobres cristianos, por el qué dirá, por respetos humanos, no se arrodillan al paso de Jesús porque sienten vergüenza, es la cobardía, la miseria del corazón que se inclina a la mundanidad. De los que en su corazón no son sinceros con Cristo, hacen como vemos. Desde lejos mirar a Cristo, ya lo hemos visto en esta imagen. Se detienen unos momentos, piensan. Es posible que a más de uno que han pasado de largo, le hayan ayudado a hacer alguna reflexión.
 
 
Por encima de "hacer un lío", que no lo veo correcto, pues es un despertar de las conciencias, porque Cristo está mucho más cerca de nosotros de lo que podríamos pensar, lo importante es ordenar nuestra vida, purificar nuestros pensamientos, nuestras obras para honrar y glorificar a Dios.
 
Al ver esta escena, pienso también que en tiempo de Jesús, la gente pasaría alrededor suyo, y no todos les reconocían, ni habían oído hablar de Él. Pero de aquel tiempo a este siglo XXI, las cosas han cambiado, pero no sé, hoy hay quienes se cierran a la presencia de Cristo en nuestras vidas. Pero este franciscano, es posible que a más de uno, haya animado a la vocación religiosa. Pues esto es Evangelización, Y esto es un ejemplo de tantos que es necesario dar vida a las calles, el hábito religioso, testimoniar a Cristo. En la foto pequeña que he añadido en esta de mayor tamaño, vemos dos personas detrás del franciscano, la señora no ha aplaudido ni un solo momento, el hombre a su lado, finalmente quiso seguir el ejemplo de esta adoradora del Santísimo, y dejó de aplaudir. La Adoración al Santísimo rechaza todas las expresiones y conductas desordenadas del hombre viejo.
 
De los aplausos, mejor no hacerlo. Pues lo que hicieron siempre las almas santas, y siguen haciéndolos, es alabar y glorificar a Dios, a Cristo Eucaristía, nunca recurren a la acción carnal de los aplausos, sino siempre, en todo momento, el sentido ordenado del espíritu.
 
Si estamos ordenando nuestra vida conforme a los Sagrados Corazones de Jesús y María, no podemos sentir vergüenza de anunciar a Cristo, ya con nuestro crucifico colgado al cuello. Y mejor aún cuando queremos honrar a Cristo con nuestros ejemplos, con nuestros pensamientos; perseverar, no descuidarnos en la vida de oración en las obras de caridad. Pero quienes nos vean, que piensen y busquen a Cristo Jesús.
 
Nuestra libertad, que es la que Cristo nos ha dado, es una derrota a nuestro hombre viejo. Si nuestro hombre viejo no nos impulsa a que aplaudamos, es que ese hombre viejo ya ha muerto, ya no es parte de nuestra  vida, por eso no nos dedicamos a los aplausos, Cristo ha vencido por nosotros para gloria de Dios Padre, nosotros incapaz de vencer al hombre viejo, Cristo ha venido en nuestra ayuda, y nos ha redimido.
 
Y sabiendo que Cristo nos ha liberado, no podemos seguir alimentando a nuestro hombre viejo, que es dar paso atrás, salirnos del camino de Cristo que nos lleva a la salvación.
 
 No dejemos pasar un sólo día sin adorar al Señor nuestro Dios, está muy cerca de nosotros, Él viene a nuestro encuentro, no pasemos de largo. No rechacemos su amor ni la salvación que nos ofrece.
 
Yo no entiendo el idioma ingles, pero el texto que el autor ha escrito para comentar esta edición de video, Bing lo ha traducido así, no la veo muy exacta: