viernes, 25 de octubre de 2013

Vencer nuestra tibieza / Sacramento de la Confesión / Agua Bendita

La tibieza convierte al cristiano en una persona que ha fracasado ante los ojos de Dios. la tibieza hace inútil la propia existencia del ser, está alejado del Amor de Cristo.
 
El alma tibia aunque rece el Santo Rosario, no sabe hacerlo desde la bondad del corazón. La tibieza no hace que el corazón sea bondadoso, sino egoísta, interesado, hipócrita, no ve con los ojos de Cristo, por lo que su miopía le lleva a una ceguera terrible, dejándose llevar por la amargura del corazón. Lo que es basura a los ojos de Dios, la tibieza hace que se vea como algo agradable, que son la idolatría, la mundanidad.
 
Pero el Señor nos concede su ayuda, y sería permanecer en el fracaso y en la miseria espiritual, si nuestro corazón.