lunes, 21 de mayo de 2012

Los sacerdotes de Alcalá apoyan al obispo Reig Plá

Ya sea un sacerdote, un obispo, cuando anuncia el mensaje de Cristo, y la pone en práctica, es perseguido por quienes no aceptan la libertad de los hijos de Dios. Se le toman en serio sus palabras, y por eso se afanan por hacer callar.

De otra forma, no lo persegerían, por ejemplo, si alguno desde el púlpito, algunos pueden pensar: "a este no hay que hacerle demasiado caso, pues predica una cosa, pero vive como nosotros los mundanos, si tienen que ir a algún encuentro deportivo, ellí le encontramos, divirtiéndose como nosotros".

Y es que los hijos del mundo no se preocupan de quienes aún hablando de Jesucristo, tiene su corazón lejos de Él.

Pero cuánto, el alma consagrada no solamente denuncia el pecado, que por cierto, el Papa dice que todos los cristianos tienen el deber de denunciar el mal.

Pues como iba diciendo, cuando un consagrado da testimonio con sus obras pero también con sus palabras, no tarda en enemistarse. Sienten un grave estorbo cuando el obispo, monseñor Reig Pla, lo único que se preocupa es de llevar almas a Dios, de sacarlas de los infiernos para llevarlas al cielo., Los pecadores incorregibles, se sienten aludidos por esas palabras pronunciada un Viernes Santo.

Los hijos e hijas de Dios, en este sentido amamos a la Iglesia Católica, y por eso, oramos unos por otros porque lo necesitamos. La misión del obispo es muy importante, por eso, necesitamos hacer orar sobre todo en los momentos más difíciles, que cuando se denuncia la maldad, los pecados, siempre hay algunos que se cierran en sí mismo, por la esclavitud de sus pecados.

Pero ¿para qué gritan y desprecian a los obispos y sacerdotes y también al resto de los católicos? pues con este comportamiento, están ganándose cada vez más un juicio más riguroso en el Tribunal de Cristo.

La Iglesia enseña que hay que acoger a los pecadores, pero tolerancia cero, sea cual sea el delito, el pecado, al pecador se le acoge con todo respeto, porque quiere salir de ese estado de muerte; sea cual sea el pecado.

Los católicos españoles, también por medio de sus oraciones, están en comunión con nuestros hermanos perseguidos, ya sea en el extranjero, como en Europa, en España, en todo el mundo.

Una cosa es clara, que el perseguidor, siempre tiene la causa perdida, porque Dios sabe velar por los suyos, siempre lo ha hecho, y siempre lo hará, estará del lado del justo perseguido, pues no se perderá su alma. Por el contrario, cualquier enemigo de nuestra fe católica, también han de pasar por un juicio, el Juicio que Dios tiene, y según las obras de cada cual.

Se dice que ha sido aplaudido, diez minutos. ¿No era mejor dar gloria a Dios y rezando ese mismo tiempo en vez de aplaudir? Porque los que aplauden llegan a inclinar su corazón al mundo, no saben lo que quieren, pero el que reza y da gloria a Dios, tiene muy claro que es lo que quiere.

Las oraciones son más importantes, cuando se reza de corazón, esa oración llega a Dios, pero no los aplausos, que es la mismo actitud de quienes persiguen a los hijos e hijas de Dios, y no podemos hacer lo mismo que los mundanos.

Alergias al pólen (abundan más en las ciudades)

Ayer domingo, fue un día en que la alergia, en lo que toca a un servidor, se hizo notar fuerte.