domingo, 18 de noviembre de 2012

Los verdaderos adoradores

  • Examinad que es lo que agrada al Señor, y no participéis de las obras infructuosas de las tinieblas, antes bien, denunciadlas [Ef 5, 10-11].


Sucede cosas así, y muchos que vamos a la Santa Misa, tenemos que soportar barbaridades interminables de “pastores” que predican. Y para ellos no pasa nada.

Una de las barbaridades, es que la Biblia ya no es una carta de Amor de Dios para todos nosotros, sino simple "simbolismo", y es por eso, que ha expulsado a Cristo de sí, sea quien sea... 
En el fondo, sea quien sea, cuando predica “¿Adoración perpetua? ¡Ni se te ocurra!”, es un ejemplo de tantos, de quienes nada quieren que ver con Jesucristo, ¿Más actividad por los pobres y menos adoración?, este es el plan de Satanás, que aquellos que siguen esta línea de tinieblas, han perdido totalmente todo respeto por Jesucristo, sí, es verdad que se dedican a algunos pobres. Pero resulta, que por falta de obediencia a la Iglesia, y amor a Jesucristo, termina por enojarse con los más necesitados, o, el favoritismo está por medio. Allá donde el corazón no se dedica a la adoración a Cristo, está la maldad, la cizaña, la hipocresía, el hacer oído sordo a las enseñanzas del Papa en cualquier teme, sobre todo en la liturgia.
En una homilía, ¿de qué sirve de qué se diga cosas bellas si después no obedece a Jesucristo? Sino para confundir más a los pobres ignorantes, dejarles en la oscuridad de la fe. Ya que los por su debilidad y pocos acostumbrados a los deseos del Señor, se imaginan: --“Este sacerdote dice cosas que dice Jesús, y que la iglesia obedece, pero él ni los hace, por tanto, también parece que está permitidos, asi que, se puede decir lo bueno, pero hacer lo malo”--. En realidad estas cosas está sucediendo por mi barrio, más por una zona que por otra.
Las barbaridades que se dice en tales homilías no es nada edificante. Luego, ¿de qué sirve poner un letrerito diciendo, que hay que procurar silencio, si luego habla la gente, porque lo ve que también lo hace el párroco?
No se trata de despreciar al párroco, sino de defender lo mismo que defendieron todos los santos y santas, sobre el amor que debemos mantener a Cristo y a la Iglesia Católica.
Pero estos desordenes se deben a que el alma no es sincera con Dios, pues una cosa es apariencia de rezar, pero luego, en esa apariencia, las obras del árbol malo, se hace patente públicamente.
Mal consejero debe ser: -“¿Adoración perpetua? ¡Ni se te ocurra!”-. Si amamos a Cristo, no podemos hacer caso a estos consejos que no aman al Señor.
La Adoración Perpetua, concede una posibilidad, para alcanzar la adoración en espíritu y verdad, la voluntad de Dios:
Es precioso lo que enseña el Señor, pero los malos pastores no están por la labor.
 
  • «Pero se acerca la hora, ya está aquí, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y verdad, porque el Padre desea que lo adoren así. Dios es Espíritu y los que adoran deben hacerlo en espíritu y verdad» (Jn 4, 23-24).


  • "En mi alma haré una celda donde adorar a Dios día y noche, de modo como María mi alma estará a los pies de Jesús escuchando sus voces e inspiraciones; y mi cuerpo será como Marta andará con humildad y solicitud, obrando todo lo que conozca ser de la mayor gloria de Dios y bien de mis projimos.
     Tendré siempre presente a Dios en mi corazón de modo que pueda decir: Deus cordis mei
    . (S.Antonio Mª Claret)"


No, hermano, no seas enemigo de Cristo, no aconsoje lo que conviene a Satanás: "¿Adoración perpetua? ¡Ni se te ocurra!" No hay que promover el mal. La Adoración nos ayuda a purificar nuestras imperfecciones, nos hace salir de nuestra tibieza, el mejor comprender la Misericordia de Dios, y que por lo tanto, también la Justicia Divina.

Ese tipo de consejos pertenece a las obras infructuosas de las tinieblas.

El problema del demasiado activismo, la demasiada atención por trabajos exteriores, es no preparar el propio espíritu para que todo el trabajo sea más descansado, lo cual es imposible sin la adoración y el recogimiento interior.
La oración es más importante que todos los trabajos sin oración, o que se ore atropelladamente, no se consigue alcanzar los frutos deseados.
Todo cristiano, necesitamos hacer más vida de oración que de trabajo, pues el fruto de la oración se hace, como queda entendido, que el trabajo sea más eficaz para bien de todos.
El mucho trabajo, pero sin el recogimiento de la oración en espíritu y verdad, tiene consecuencias extremadamente desastrosas. Por ejemplo, la pérdida de la fe, se han cerrado monasterios y conventos, las aficiones mundanas, a cualquier cosa, hacen una gran daño interior, como en lo externo.
Por lo tanto, “¿Adoración perpetua? ¡Ni se te ocurra!”, yo respondo, a quien tenga este tipo de sugerencia, hay que huir de él, porque no es servidor de Cristo, y lo mismo puede traicionarte a ti, ya que lo ha hecho con Dios, con todo descaro y malicia, sugerencias venga de donde venga. Ya que no quiere tu bien, sino tu ruina.
Quiere tu ruina también todo aquel que no obedece al Papa ni al Magisterio de la Iglesia Católica, sea quien sea.  
La Adoración Perpetua, es un bien inmenso para la Humanidad entera, sin duda alguna, Por tanto no ama a Dios, los tales que no promueven una entrega más perfecta a Dios por medio de la Adoración.
 
Es un desconocimiento de la Palabra de Dios, desconocimiento no por ignorancia, porque se ha perdido, algunos el interés en conocer

 
Para saber más:

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